sábado, 16 de septiembre de 2017

La chica que le gusta arreglar a la gente

Todos hemos estado rotos y muchos de nosotros todavía lo estamos. Aprendemos eso tarde o temprano.

Para los que hemos aprendido desde el principio, sabemos que aunque todos tienen un punto débil, la gente está evolucionando continuamente.

Todo el mundo puede curar su corazón roto y tener un final feliz después de una mala situación. Todo el mundo puede tener éxito incluso si han tenido miles de fracasos. Cada cicatriz se puede curar y todo puede mejorar.

Las chicas a las que nos gusta arreglar a la gente lo sabemos mejor que nadie.

Somos empáticas. Queremos ver a la gente a nuestro alrededor feliz y nos gusta inspirar a crecer y sanar cuando sea necesario.

Somos más valientes que cualquier otra chica porque tenemos el valor de tomar medidas.

Manténgase​ cerca porque será la mejor relación de su vida. ¿Por qué? Voy a hablar de mí misma, como siempre hago.

1. Hago cualquier cosa, menos abandonar.

No me doy por vencida en el primer obstáculo que enfrento. Para mí, cada problema tiene una solución y no importa lo que se necesite. Nunca dejo de intentarlo. No entro en pánico cuando me enfrento a una situación difícil. No importa a qué dificultad me enfrente, no me detengo hasta que lo arreglo.

2. Tengo un acercamiento positivo a la vida cotidiana que me ayuda a solucionar problemas más fácilmente.

En mis relaciones, siempre trato de centrarme en lo positivo en lugar de lo negativo. Creo en la gente y en la conexión que existe. A veces, veo el potencial en los demás antes que ellos mismos.

3. Si no tengo éxito en ese momento, probablemente tendré éxito pronto debido a mi perseverancia.

Así como inspiro a ser mejor, en el mismo asunto soy persistente con mis propios esfuerzos. De la misma manera que quiero arreglar a los demás, también estoy constantemente tratando de arreglarme y ser la mejor versión de mí misma.

4. Soy una creyente.

Muchas personas me han dicho que no puedo arreglar a todo el mundo, pero no renuncio. Siento que algunas personas necesitan algo de ayuda para tener éxito y deseo ser esa mano gentil para la gente que me rodea.

5. En mi pasado, he fracasado y sé cómo se siente perder la motivación y romperme.

Me he curado de eso y deseo ayudar a sanar, también, incluso cuando tienen vergüenza de admitir que necesitan ayuda. Me considero lo suficientemente valiente como para actuar incluso si no me lo han pedido para reparar un corazón roto.

6. Soy consciente de que todos tienen un lado oscuro.

Pero en vez de criticar, ofrezco apoyo y ayuda para los fracasos. Tu lado oscuro me es familiar, así que lo uso para mostrar el lado positivo de la vida. Jamás juzgo, y estoy al lado de mis afectos, pase lo que pase.

7. También soy consciente de que nadie es perfecto.

He abrazado mis defectos y he aprendido a vivir con ellos. De la misma manera, que alguien toma mi mano mientras abrazo la suya. Siempre brindo apoyo y animo a utilizar las imperfecciones como ventaja.

8. Perdono y olvido.

Me han dicho que sólo las personas más fuertes son capaces de perdonar y para mi, el perdón viene cuando veo a la gente como realmente son. Soy consciente de que todo el mundo comete errores, incluso yo. Creo firmemente en las segundas oportunidades.

9. Haré todo lo posible para arreglarte, pero no me iré más tarde.

No pienses que sos apenas otro desafío o que estoy cerca tuyo porque necesitas ser arreglado. Siempre estoy tratando de arreglar a la gente que amo. Si quiero ayudarte, significa que quiero verte feliz y sé que puedes hacerlo mejor.

10. Soy una luchadora y quiero ver el mundo convertido en un lugar mejor.

Al arreglar a otros, quiero arreglar el mundo y ser parte del cambio. En lugar de ser ociosa y permanecer pasiva, tomo medidas para ayudar al mundo. Estoy convencida de que esta determinación de hacer cambios positivos en la gente, motivará a los demás a hacer lo mismo.

Recuerdo a un muchacho que me gustaba mucho que una vez dijo: querés a demasiada gente.

Sonrío al recordar sus consejos de vivir aislada de interacción emocional con otros seres humanos. Él eligió no estar conmigo porque soy inchapelotas.

Este es mi modo de vida. Gracias por preocuparte muchacho de linda sonrisa, pero me gusta dar. Voy a seguir haciéndolo. Voy a seguir estando bien.