sábado, 22 de diciembre de 2012

Capítulo 6: Una expresión de mí

Encontré una forma de vivir conmigo misma. Lo que antes parecía imposible por todo el ruido de mi propia mente, ahora se hace realidad mediante mis propios talentos. Acabo de descubrirlo.

Mientras escribo estas líneas, me está cantando Amy Winehouse, estoy almorzando sola y comiendo lo que más me gusta en el mundo: barritas de cereales y frutas en almíbar. ¿Quién dijo que debo comer otra cosa?

Ayer empecé a pintar de vuelta. Mientras el óleo seca, escribo, mientras escribo como y mientras como Amy me dice que no necesito rehabilitación y que el amor es un juego perdido. Al final, estoy mejor.

Esta es una soledad que no me imaginaba. Aunque todavía me cueste mirarme al espejo me estoy ocupando de vuelta de mi casa. Hoy vino el técnico a arreglar ese cañito del split que goteó por meses sin que me importe. El split funciona de maravillas y ya no hay charquitos de agua en el pasillo. Batalla ganada.

Vino el carpintero, quién es el esposo de mi madre pero no lo llamo padrastro ni se por qué, y diseñamos todos los detalles que le faltan a mi casa desde hace casi un año. Estuve demasiado ocupada en mi mierda egoísta por eso no lo hacía. No era problema de dinero. Era problema de voluntad.

Un íntimo amigo me dijo en el medio de mi tsunami emocional "escribí tu plan de vida". Hoy lo hice. Anoté los meses del 2013 y una meta personal para cada uno de ellos.

Sé que los voy a cumplir.